Monday, August 4, 2014

(consejos a mi madre)

Estas fueron las instrucciones a mi madre (70) para iniciarse en la alimentación paleolítica. Me gusta llamarla "alimentación Sapiens" porque no se trata de "volver" a ningún lado, sino de comer el alimento de nuestra especie, Homo Sapiens. Pasados cuatro meses (escribo esto el 10 de diciembre), mi madre sigue con la alimentación sapiens y dice estar en su peso "de hace diez años" (no revela números) y sintiéndose muy bien y sin ninguna dificultad.

A los que la intenten: pueden saltearse la parte de las mediciones, que era sólo a los fines del experimento.

Inicio: lunes 4 de agosto
Paradas para ver si se sigue: cada 2 semanas  
Total: 10 semanas.
Instrucciones, fuera de la alimentación
  • No cambiar deliberadamente nada del estilo de vida salvo la comida (para mantener “todo lo demás constante")
  • Pesar y medir cintura a comienzos del día 1, si es posible también noche anterior y sacar un promedio.
  • Anotar peso en + o - respecto al “baseline”, y cm de cintura, cada cuatro días: las mañanas de los lunes y los jueves durante el experimento.
  • OPCIONAL: anotar cada día qué comiste, en cantidades aproximadas.

Instrucciones, alimentación
  • CLAVE: no restringirse nunca jamás en cantidad, eso atenta contra este tipo de alimentación. El hambre es buena: nos dice si el cuerpo necesita más alimento. Si hay hambre, se come, si hay más hambre se come más.. Jamás contar calorías. Las calorías son buenas, son el principal (no el único) aporte de los alimentos. 
  • Qué se puede comer. La teoría: “Todos los alimentos *del estilo aunque no necesariamente idénticos* a los que podían ser una parte relevante de la alimentación antes de inventarse la agricultura. En esencia: todas las partes de cualquier planta salvo las semillas (podés comer semillas pero sólo en proporciones chicas, imaginate que no podían representar mucho del alimento porque es una fiaca buscar tantas si sos recolector); todas las partes de cualquier animal (mamífero, pez, ave, insecto, reptil, anfibio) en cualquier edad, huevos incluidos. Y cualquier cosa que se produzca usando esas partes, por más que sea “procesado” (siempre que no tenga ingredientes prohibidos, cosa difícil).
  • Tipicamente, esto incluye: cualquier carne, cualquier fruto, cualquier verde, cualquier raíz o tubérculo, cualquier pescado, huevos, miel. Por ser semillas “grandes” y por lo tanto posiblemente una fuente más importante de calorías en aquella época, frutas secas. Vino, aceites de oliva, jugos de fruta, todo en cantidades ilimitadas. Las infusiones como el café tienen mínimas partes de semillas, así que todo bien. Los embutidos tienen una cantidad de sal zarpada, pero todo bien (ver abajo).
  • Todo en cualquier cantidad, combinación, horario que se te dé la gana.
  • Quizás es más fácil entender qué no comer: principalmente, los “5 venenos blancos”: 1) harinas de cualquier semilla (pero no de mandioca, por ejemplo. que es un tubérculo); 2) arroz; 3) azúcar (en realidad definicionalmente entraría, pero en cantidades tan módicas que mejor no); 4) lácteos. Respecto a la sal, hay todo un debate. Sal en cantidades muy moderadas comería esta gente (sobre todo en frutos de mar). Con moderación entra. Tampoco otras semillas tipo garbanzos, lentejas, pero de nuevo: todo está en la proporción. Un guiso de lentejas por ahí está fenómeno.

Grado de fundamentalismo
  • Como estilo de vida, es un poco difícil y antisocial ser fundamentalista y no apartarse jamás. Pero la idea es que durante el experimento no comas pan, ni pizza, ni nada por el estilo.
  • Si te resulta muy trabajoso, en alguna de las paradas cambiamos al régimen “con excepciones”.
  • Como estilo de vida permanente, la lógica sostenible es: “cuando yo elijo la comida, me alimento así; si me invitan a algún lado y hay “comidas neolíticas” (con harinas, arroz, etc), o estoy en una circunstancia de hambre sin alternativas, me alimento con otra cosa, total de todos modos va a ser una proporción pequeña de mi alimentación”.

Consejos, alimentación
  • Al desayuno lo más práctico es cualquier tipo de fruta. Si es invierno y querés algo “calentito”, cortar una manzana en gajos y calentarla en el microondas, funciona muy bien, yo la como con cáscara porque es más fácil y rico. Lo mismo banana (sin cáscara en este caso!). A cualquiera le podés poner frutas secas molidas si querés. Alimenta muchísimo. Además de cualquier infusión. Leche en el té o café es un apartamiento mínimo e irrelevante así que lo permitimos de movida.
  • Hay gente que también come con huevo el desayuno, qué sé yo. Alguna vez lo hago, incluso por ejemplo mezclado con banana (todo cocido junto un par de minutos), pero not my cup of tea.
  • Para “snacks”, uvas en el congelador suman, además de cualquier fruta o fruta seca. La uva congelada (las llamo “canicas”, porque hacen el mismo ruido si las soltás en el plato) son como una gotita de helado. Muy ricas y recontrapráctico: comprás algunos racimos por mes y listo, garantizado que nunca tenés hambre. Me dicen que también se puede con cualquier otro fruto rojo.
  • Para las comidas del mediodía y la noche hay mil variantes de combinaciones de carnes o pescados con verduras.. Cosas menos frecuentes y tan baratas como el pan: mejillones, cualquier tipo de órgano animal, woks, anchoas compradas frescas y después hechas tipo “boquerones”.
  • Lo obvio para comer rico y paleo son cosas como carne con papas, bifes a la criolla, puchero, sopas, estofados, puré (con aceite de oliva puede ser), cualquier preparación con pescado, tortillas, bife con huevo frito doble-caballo (oliva) y papas fritas (oliva). En general yo como las cáscaras de las papas.
  • Buenas opciones para comer afuera: comida peruana, que tiene en general mucho pescado y papas; cosas del sudeste asiático evitando el arroz.
  • Para postre, además de frutas, una cosa muy buena es tener cualquier fruta pisada en una copa en el congelador y comerlo tipo helado. O combinaciones de frutas pisadas. Siempre tiene que ser de, o incluir, alguna fruta con “consistencia” tipo manzana banana o pera.
  • Otras preparaciones: a cualquier puré o combinación de purés le podés poner cosas cocidas adentro como pedacitos de carne o de vegetales y después ponerlo como tortilla en una sartén para que se tueste. Es medio parecido a la “causa” peruana. Alimenta mucho, muy rico y extremadamente barato.